En el mundo del pádel, pocas voces tan reconocidas como la de Óscar Solé relator del A1 Padel. Originario de Uruguay y con una carrera que abarca décadas y continentes, Solé ha sido un pionero en llevar el pádel a un público global. En esta conversación exclusiva con Nación Pádel, Óscar nos relata su fascinante viaje a través de los años, compartiendo de cómo el pádel se convirtió en parte central de su vida. Además, nos ofrece su visión sobre el futuro del pádel. Acompáñennos mientras exploramos la historia y las anécdotas de uno de los grandes narradores del pádel moderno.
Los comienzos en Uruguay
Nación Pádel: Óscar, para comenzar esta conversación, y como es clásico en nuestras entrevistas, la primera pregunta es un pequeño resumen expresado con tus propias palabras. Nos gustaría que nos contaras libremente sobre tus orígenes, tu carrera como periodista, tu vida en Uruguay y en Málaga, y cómo se vincula todo esto con el pádel. Una breve reseña de quién es Óscar Solé según Óscar Solé.
Óscar Solé: Muy bien. Veo que vienes bien informado, me gusta. Mi nombre es Óscar Solé, soy uruguayo, tengo 54 años y llevo más de 20 años. Intentando llevar el pádel al mundo, explicando a la audiencia y creando aficionados para este deporte, algo que nunca había imaginado. Comencé en el periodismo deportivo en Uruguay cuando tenía apenas 16 o 17 años.
Posteriormente, me especialicé en temas económicos y agropecuarios. Incluso, tuve alguna experiencia aquí. Estuve en Chile como periodista uruguayo durante los inicios del Mercosur.
Por razones económicas, y debido a los cambios en Uruguay alrededor del año 2000, los medios en los que trabajábamos en ese momento, tanto en radio como en prensa, enfrentaron problemas económicos. Esto nos obligó a dejar el país junto con mi familia y nos trasladamos a Ferrol, en La Coruña, España, donde vive toda la familia de mi esposa, Sandra.
Al principio en España, hicimos de todo, incluso, como se dice comúnmente, lavando copas en algún bar. Hasta que un buen amigo, hoy como un hermano para mí, Enrique Alegre, nos abrió las puertas a este mundo llamado pádel.
Bienvenido al mundo del pádel
Nos propusimos como organizadores del Mundial de 2006 en Málaga, que finalmente se trasladó a Murcia. Fue ahí donde comenzó la era del circuito profesional en España con lo que fue en su momento el Pádel Pro Tour, el primer circuito profesional. Ya para esa época, muchos de los mejores jugadores argentinos se habían establecido en España, obviamente por las mejores condiciones económicas.
Conocimos a un joven Fernando Belasteguín, a Juan Martín Díaz también, quienes ya lideraban el ranking en aquel entonces. A partir del año 2006, comenzamos nuestra trayectoria con Pádel Pro Tour, que se extendió hasta el año 2011-2012, cuando la empresa Estrella Damm, junto a la Asociación de Jugadores Profesionales de Pádel, en aquel momento crearon lo que era el World Pádel Tour.
NP: En toda esta etapa estuviste alrededor de 14 años.
OS: Bueno, no, un poco menos, porque esos fueron los comienzos del circuito, desde el inicio. Trabajamos muy duro para lograr un cambio en la puesta en escena de los torneos de pádel. La situación había mejorado muchísimo; comenzó el tema de la televisión, que al principio era una retransmisión muda, como solía decir, hasta que un día, le propuse al director de World Pádel Tour de aquel entonces ponerle voz a la retransmisión, sin pensar nunca en hacer un relato, porque la intención era comunicar a los aficionados lo que estaba sucediendo en el pádel.
NP: Pero antes de eso, ¿nunca habías tenido alguna relación con el relato deportivo?
OS: No, nunca. De hecho, uno de los principales relatores de fútbol en Uruguay, desde los comienzos de la radiofonía en el país, fue Carlos Solé. Carlos fue el gran relator de fútbol durante la década de 1950 y más allá, y era primo abuelo, primo hermano de mi abuelo. Yo ni siquiera lo conocía. Cuando comencé a trabajar en Radio Sarandí, donde él había triunfado, nunca me dediqué al relato deportivo. De hecho, cuando me mudé a España, jugaba Peñarol contra Real Madrid y desde Radio Sarandí me pidieron que narrara el partido. Hice una narración espontánea, en ese momento. Pero el verdadero relato deportivo comenzó con World Padel Tour. Empezamos simplemente contando a la gente lo que estaba sucediendo.
Un buen día, junto con una gran amiga y compañera en ese momento, Andrea Ballester, ambos nos pusimos al micrófono y comenzamos a describir un poco más cómo iba el partido, invitando a jugadores y entrenadores, y de allí surgió todo esto.
NP: Cuando te dieron esa oportunidad de entrar al mundo del pádel, ¿era la primera vez que te enfrentabas al pádel o ya habías oído hablar de él en Uruguay?
OS: No, nunca había estado involucrado. Lo único que había hecho era jugar como todos los niños en aquel momento, en la década de los 90, con mis mejores amigos.
NP: Sí, durante el primer ‘boom’.
OS: Exacto, el primer ‘boom’, porque había canchas de pádel por todas partes en Uruguay, aunque todavía eran de muro, no de cristal. Y esa fue la única vez que tuve contacto con el pádel, además era muy malo jugando. Mi hermano se destacaba, pero yo era horrible. Y cuando mi amigo en España me propuso ayudarle con esto del pádel, yo no tenía ni idea de quiénes eran los jugadores. Solo recordaba a Lasaigues y Gattiker porque eran muy famosos y mencionados aquí en Sudamérica, pero allá en España, no tenía ninguna relación ni vínculo con el mundo del pádel.
NP: Los circuitos comenzaron, como tú decías, con Padel Pro Tour y se centraron principalmente en España. Después empezó a rotar por algunos países. Cuando comenzó World Padel Tour, pudo tomar forma. Y más aún con A1 Padel, empezó esta rotación por distintos países, incluso distintos continentes. En esta situación, dado que viajas constantemente, ¿cómo lo manejas? ¿Te acompaña tu familia? ¿O utilizas videollamadas? ¿Cómo lo haces?
OS: No, mira, llevo ya 18 años viajando porque, claro, los primeros años de Padel Pro Tour todos los torneos eran en España y los organizadores eran todos españoles, hasta que en el año 2009 tuvimos la primera experiencia, si mal no recuerdo, fue en Mendoza, un torneo que ni siquiera creo que fue puntuable. En 2010, sí fuimos a Mar del Plata, en Argentina, con un torneo puntuable. Y ya a partir de la etapa de World Padel Tour es cuando se empieza a abrir un poco más el mercado europeo y empezamos a viajar un poco más, llegando inclusive hasta Dubái, donde tuvimos un torneo allí.
NP: ¿Y cómo lo hacen? ¿Mensajes, llamadas, videollamadas?
OS: Bueno, hoy es un lujo. Recordemos que cuando comenzamos en 2010, no había tanta posibilidad tecnológica para hacer una videollamada. Hoy, por suerte, sí hay videollamadas disponibles para todos. Incluso te diría que prácticamente cada día o al menos día por medio, tengo la posibilidad de conectarme con la persona que más quiero en este mundo, que es mi nieto, que apenas tiene nueve meses, pronto cumplirá diez, y es a quien puedo disfrutar cada vez que salgo de viaje.
Óscar Solé al A1 Padel
NP: Ya hablamos del World Pádel Tour, pero pasaste al A1 Pádel. Bueno, aún no se llamaba A1, pero recibes el llamado de Fabrice Pastor. Cuéntanos un poco sobre esa situación. ¿Cómo diste ese salto?
OS: Claro, en aquella época del World Pádel Tour, nos despidieron a todo el equipo de comunicación. Fue un momento de revolución, podríamos decir, porque la situación tampoco había caído bien entre los jugadores ni los aficionados. No lo voy a olvidar nunca y le estoy eternamente agradecido a este señor, a Fabrice Pastor, a quien tuve el gusto de conocer en 2015, cuando organizó el primer torneo de pádel en el Principado de Mónaco. Ahí se declaró como un fan de mis retransmisiones, me invitó a recorrer el Principado y luego tuvimos otro encuentro en Galicia, en otro torneo.
Él solía asistir a cada uno de los torneos del circuito en España, y fue justo después de que nos despidieran del circuito, al día siguiente recibí su llamada diciéndome: «No te preocupes, te vienes a trabajar conmigo», cuando todavía él no tenía una estructura definida en cuanto al pádel. Porque Fabrice Pastor se involucra de lleno en el mundo del pádel en 2015, anteriormente en Mallorca organizaba algunos Pro-Am con jugadores profesionales, pero como empresario del pádel fue a partir de 2015, cuando primero creó, con una brillante idea y buena visión, la Fabrice Pastor Cup. Esto fue a partir de 2015, y Chile fue precisamente una de las sedes. Estuvimos en Argentina, Brasil y Chile. Y fue a través de la Fabrice Pastor Cup donde fuimos desarrollando todo este proyecto padelístico, hasta llegar a hoy con este circuito de A1 Padel.
NP: ¿Cómo consideras la evolución de este circuito?
OS: Increíble, realmente increíble. Si bien el modelo de la Fabrice Pastor Cup era diferente, porque la intención de Fabrice era justamente ayudar a las futuras estrellas, les daba la posibilidad de llevarlos a Europa a jugar un torneo, todos los gastos pagados, de patrocinarlos. Incluso recuerdo la época de Tello-Chingoto, a quienes llevó a vivir a Mónaco con él. Entonces era un proyecto diferente, era alimentar la ilusión, el sueño de los pequeños jugadores de pádel de salir de su tierra, de conocer el mundo y de hacerse realmente profesionales.
Pero luego llegó la etapa en 2018, donde los jugadores estaban acabando el contrato, el acuerdo que tenían con World Pádel Tour y ahí Fabrice apostó un poco más, teniendo en ese momento un total de 27 jugadores patrocinados, de hacer una apuesta por crear su propio circuito. Y bueno, en esa primera instancia, en 2018, no se dio esa posibilidad. Algunos jugadores prefirieron seguir con el modelo de World Pádel Tour, algo que no critico, porque es un circuito que siguió creciendo con el tiempo, llegó a más países, y fue a partir de entonces cuando a Fabrice le entraron las dudas de si seguir o no en este mundo del pádel. Seguimos desarrollando la Fabrice Pastor Cup, y no fue hasta el año 2019 cuando surge la posibilidad de que él lidere una unión de asociaciones de pádel en Latinoamérica y el Caribe.
Y fue a partir de 2019 donde empezamos los torneos de la era de la CAF, que era la Confederación de Asociaciones Americanas de Pádel, y a partir de ahí surge la idea del American Padel Tour, que fue el primer circuito American Padel Tour. En el año 2020 comenzamos, con torneos en México, fueron dos torneos, uno de ellos fue el primero en Mérida, el segundo en Acapulco, y luego de ese torneo de Acapulco tuvimos que parar la máquina, como se paralizó todo el mundo, por culpa del COVID.
Otro duro golpe para el proyecto, que no se abandonó, que pasó a llamarse APT Padel Tour, por unos temas de nombres, de marcas registradas, en fin, nada que tuviera que ver. Pero seguía apostando Fabrice por desarrollar el pádel en América, únicamente en América. ¿Qué pasó? Que después de la pandemia esto fue un boom total en todos lados, y empezaron los empresarios europeos a interesarse por el circuito, y de ahí que diéramos el salto, primero al continente europeo, luego al continente africano, y ya en esta última etapa llegando a los Estados Unidos con este nuevo formato que se llama A1 Padel.
NP: ¿Qué diferencias consideras que existen entre el A1 Padel y el Premier Padel, siendo ambos circuitos principales en la actualidad?
OS: Bueno, obviamente no voy a negar que la gente conoce ya desde hace muchos años al Premier Padel, principalmente por la difusión que han tenido y por el nivel de los jugadores, que provienen del circuito World Pádel Tour. Nosotros, como te digo, empezamos con un proyecto diferente, enfocado en el desarrollo del pádel en América, por lo que muchos de nuestros jugadores han estado con nosotros desde los inicios. No nos comparamos con nadie; somos un circuito más. Siempre reconocemos el nivel que tienen los jugadores del Premier, pero es importante estar en la pista. Muchos jugadores de allí han participado en nuestro circuito en varias ocasiones, encontrándose con que nuestro nivel también es muy bueno. De hecho, nuestros jugadores también participan en Premier, porque tienen la libertad de hacerlo.
NP: ¿Tienen la libertad de transitar entre ambos?
OS: Correcto, los jugadores que firman contrato con A1 Padel tienen la libertad, siempre y cuando cumplan con los torneos del circuito, de jugar en otros circuitos, ya sea Premier o cualquier otro. Cuando hicimos el contrato, lo establecimos sabiendo que existía la posibilidad de que varios de nuestros jugadores participaran en otros circuitos. Pero la obligación que tienen todos aquellos que firman con A1 Padel es jugar al menos el 50% de los torneos en la categoría Open y el 100% de los torneos en las categorías Master y Grand Master.
Crecimiento y el futuro del pádel
NP: ¿Cómo consideras que ha impactado la televisación dentro del circuito y del pádel en general?
OS: No te imaginas las dificultades que tuvimos para que el pádel entrara en los medios importantes en España, y no te hablo solo fuera de España, sino en España misma, donde están todos los mejores jugadores del mundo. Era muy difícil que un periódico, o en este caso los diarios deportivos más conocidos como Marca o AS, nos dieran un espacio, aunque fuera reducido, para el pádel. Por eso te digo que he tenido la suerte de vivir toda esta evolución. El pádel comenzó siendo muy digital, es decir, cuando empezaron las famosas redes sociales, fue ahí donde nos nutrimos de varios colegas que empezaron a darle cada vez mayor difusión, y por eso les tengo gran estima por el trabajo gratuito que realizan para promover este deporte.
Fue a partir de finales de la primera década de este siglo cuando la televisión española transmitió los primeros torneos de pádel y luego, en la era de A1 Pádel, logramos un acuerdo brillante el primer año con empresarios argentinos y ESPN. A partir de ahí, ESPN primero en Latinoamérica y el Caribe, junto con Star Plus, y luego, a la vista de la evolución que ha tenido el circuito, se abrieron otras puertas. En Europa, ahora con Liga Sport Televisión para España, que es el canal de la Liga de Fútbol, con DAZN, una plataforma muy potente en Europa, tanto en Italia, en Portugal, como también en España, y sobre todo el acuerdo que alcanzamos para que este año, canales privados de España, la cadena Mediaset, que agrupa dos de los principales canales, Cuatro y Telecinco, lleve el pádel a todos los hogares de España.
NP: ¿Cómo ves el futuro del pádel? Primero, avancemos cinco años y después, cuéntanos cómo lo ves en un futuro más a largo plazo, en tu imaginario mágico.
OS: Mira, sé que siempre existen comparaciones, como en todo en la vida. Muchas veces nos decían que era imposible compararnos con el tenis. Hoy día, creo que a nivel mundial, se venden más palas de pádel que raquetas de tenis, algo que era impensable hace pocos años.
¿Cómo veo yo el pádel de aquí a cinco años? Pues lo veo con una evolución que ha tenido en todo el continente europeo, cómo se ha extendido desde España a Portugal, después a Italia, a Francia, a Suecia, donde es una locura, y también se ha extendido a los países árabes, que son una gran potencia. Todo esto ha posibilitado un gran crecimiento. Aún falta desarrollo en América. Afortunadamente, desde Argentina, en Chile, en Paraguay, se ve un poco más de pádel. Nunca creímos que en Centroamérica hubiera la locura que hay actualmente, como en el norte de Sudamérica, por ejemplo en Venezuela, que es una verdadera locura.
NP: ¿Y Panamá?
OS: En Panamá tuvimos un éxito rotundo. Colombia también está experimentando un gran auge en el pádel, igual que en Ecuador, en toda la zona de Costa Rica, Salvador y todo eso. Y faltan, yo diría, dos puntos importantes: uno, Brasil, que sigue sin entenderse cómo, habiendo tenido incluso al número uno del mundo, no ha tenido un desarrollo tan impresionante del pádel todavía. Y Estados Unidos, creo que es el gran mercado a conquistar.
El rol del relator
NP: Cambiando de tema, ¿de dónde viene el “Puntako”?
OS: La famosa palabrita, el puntako. Sí. La verdad que no esperaba que en algún momento se diera tan fuerte el impacto de esa palabra como tú dices, puntako. Porque incluso al comienzo de su utilización, muchos me criticaban diciendo qué es puntako, porque en realidad todo el mundo dice un puntazo.
Pero, ¿qué pasa? Que teniendo a mi amiga española Andrea Ballester a mi lado. Ella tenía una libretita donde apuntaba lo que ella llamaba puntakos para la realización de su programa en Televisión Española. Y apuntaba los puntakos. De ahí surge la palabra, que cuando veo un buen punto, lanzo el puntako. Y fue algo que fue pegando y claro, era la libreta de Ballester. Entonces yo le decía, apúntelo Ballester. Y quedó lo del «apúntelo Ballester». Ballester porque era otro punto que se utilizaba en ese resumen. Y eso fue pegando y en las redes cada vez se hizo más viral. Aunque en aquella época no era tanto como en la actualidad con Instagram y TikTok, pero fue pegando.
Y en ese momento, Adidas fue el primero que lo utilizó para patrocinar, con los carteles en cada estadio teniendo el puntako. Y luego ya hubo marca propia de puntako, academias de puntako, por todos lados. La verdad, algo que me llena de orgullo y algo que debo reconocer, no me ha generado ni un solo euro (rie), ¿eh? No, no, porque no la registré, porque bueno, surgió y ahí quedó. Y yo, sinceramente, lo interno me llena más que lo material y lo económico. No me canso de decirlo. Y me encanta llegar a cada país y que me sorprendan, como me han sorprendido aquí en Chile, donde había estado una sola vez por el pádel, y que la gente conozca el puntako.
NP: A criterio personal, considero que, claro, en la cancha hay cuatro actores, pero en la televisación hay cinco. Es decir, es muy importante “el cómo de lo que estamos diciendo». Hay cuatro gladiadores y alguien que te está contando la historia.
OS: Exacto, exacto. Si no contamos la historia, nadie conoce a los gladiadores. Ese es el tema. Entonces, eso ha sido siempre así. Es el quinto poder: el periodismo, la televisión. Y tenemos la suerte, precisamente, de crear nosotros las estrellas, de crear los héroes.
NP: Crear los mitos.
OS: Claro, crear los mitos. Es algo que también se me ha dado bastante bien, el hecho de ir poniéndoles motes a los jugadores. En su momento fueron los Reyes del Pádel con Bela y Juan Martín. En el momento de la aparición en escena de Juani Mieres y Pablito Lima en el segundo torneo, donde ya les vi algo diferente, les apodé los Príncipes. Me decían que estaba loco, que recién empezaban, que cómo iban a ser los Príncipes. Resulta que hicieron una temporada magnífica y fueron realmente los Príncipes, siendo la segunda mejor pareja en ese momento.
Y nada, se me fue dando esto de ponerle mote a los jugadores. Y hoy te diría que me encanta el hecho de tener a los mágicos, ¿no? Al extraterrestre, a Aguirre, como le he puesto a Tolito y al inventor de los golpes imposibles, como le he denominado a Gonza Alfonso.
NP: Para cerrar, me gustaría que, ya que uno de los fines de nuestro portal es contar historias que fomenten el pádel a personas que no se han topado antes con el tema del pádel. ¿Qué mensaje le darías a una persona para invitarla a que entre al mundo del pádel?
OS: Lo primero que le diría es que se acerque a un club de pádel, para que vea el ambiente que hay ahí. Yo tengo la suerte de estar, cuando no estoy de viaje, todos los días, todos los días de la semana en un club de pádel. Porque mi señora trabaja en el club de pádel de mi amigo y estoy metido ahí todos los días y hacemos torneos y distintas actividades con la gente en Fuengirola Pádel, allí en la Costa del Sol malagueña.
Un lugar estupendo que está lleno, lleno de finlandeses, de suecos, de noruegos, y jugando al pádel todos los días. Entonces, lo primero que le diría a alguien que nunca pisó una pista de pádel es que se acerque a un club, que viva el ambiente, porque es algo donde no existe la competencia, vamos a decir, es algo de buen rollo entre cuatro amigos.
NP: Hay mucho honor también, hay mucho honor en el juego.
OS: Mucho, mucho honor, mucha dignidad. Y más que nada lo que viene después del pádel, el hecho de sentarse, compartir una Coca-Cola, un refresco, una cervecita, un choripán, lo que venga. Pero el hecho es que es un deporte que une, que crea afición, que une a la familia. Porque vemos en el caso, te diría, de Europa. Yo no sé si aquí en Sudamérica sea mucho, pero tenemos núcleos de jugadores, de personas entre 60 y 75 años. Es increíble que se pasen tantas horas dentro de una pista. Entonces es un deporte que no tiene edad y que no tiene limitaciones, ni en cuanto a sexo, ni en cuanto a peso, ni en cuanto a edad, en cuanto a nada. O sea, es una diversión constante. Ya el tema profesional es otra cosa, porque estos chicos juegan a otra cosa. Esto no se llama pádel.
NP: Gracias, Óscar, por tu disponibilidad y el tiempo que nos has dedicado para conversar con Nación Pádel. Agradecemos a la organización del A1 Padel Chile por invitarnos a conocer desde dentro el torneo, todas las personas y detalles que llevan a desarrollar este importante evento a nivel de pádel nacional.
